El paso del tiempo y la sobreexposición prolongada al sol hacen mella en nuestro rostro, dejando signos de envejecimiento. Mientras que el paso del tiempo se manifiesta en forma de arrugas, pérdida de tersura, juventud y luminosidad, la exposición a los rayos solares hace que aparezcan problemas circulatorios, manchas o vasos dilatados. A esto se puede sumar la pérdida de tersura y elasticidad.

El resultado es un rostro avejentado y con un aspecto más mayor. Los tratamientos de rejuvenecimiento facial pueden ser la mejor medida para combatir y parar los signos del paso de los años en el rostro.

Tipos de envejecimiento

Según la causa que lo produce, el envejecimiento facial puede ser de dos tipos:

1. Envejecimiento cronológico. La causa es la edad, el paso del tiempo. Es un proceso natural por el que los huesos y músculos del rostro pasan, perdiendo volumen y definición.
2. Fotoenvejecimiento. La causa principal es la exposición continuada al sol, lo que produce la aparición prematura de imperfecciones en la piel como manchas, vasos dilatados, arrugas y flacidez.

¿Cómo se manifiesta el envejecimiento facial?

El envejecimiento facial comienza a aparecer cuando el metabolismo reparador pierde la batalla frente al desgaste. Este desequilibrio hace que la piel se quiebre, a veces ayudado por la preponderancia de los músculos faciales, y empiezan a aparecer el descolgamiento cutáneo, lesiones pigmentarias, arrugas.

Estos son los signos más comunes en el envejecimiento facial:

• Arrugas de expresión. Son las que aparecen por la repetición inconscientes de ciertos gestos. Si estás arrugas son marcadas pueden hacer que el rostro luzca con un aspecto enfurecido o envejecido.

• Flacidez. El paso del tiempo hace que se vaya perdiendo volumen o disminución de fibras como la elastina o el colágeno haciendo que la piel del rostro pierda firmeza y se produzcan descolgamientos y arrugas.

• Falta de luminosidad. La deshidratación, falta de tersura, células muertas o piel sucia pueden hacer que el rostro tenga un aspecto oscurecido, falto de luminosidad, y por tanto envejecido.

• Arrugas faciales. Las arrugas faciales son los signos más extendidos del envejecimiento, suelen aparecer a partir de los 30 sin darnos casi cuenta.

Tratamientos de rejuvenecimiento facial faciales sin cirugía

El rejuvenecimiento facial sin cirugía se consigue mediante tratamientos faciales poco o nada invasivos que se aplican, en la mayoría de los casos, de forma ambulatoria. Dichos tratamientos están indicados cuando el envejecimiento se encuentra en un grado de leve a moderado. Los resultados suelen ser visibles casi al momento de realizar el tratamiento y los pacientes pueden reincorporarse a su rutina habitual casi de inmediato.

Aclarar que no existe un tratamiento facial que sea mejor que otro, la elección del mismo dependerá de las necesidad específicas de cada paciente.

Relleno facial

El relleno facial consiste en la inyección de productos naturales reabsorbibles en el rostro. Con este tratamiento se consigue eliminar o atenuar arrugas, generar o recuperar volúmenes y revitalizar la piel. Normalmente se realizan en una única sesión. Los resultados son visibles casi de inmediato, son duraderos entre ocho y diez meses aproximadamente, dependiendo de cada paciente.
Aclarar que hay diferentes tipos de rellenos, por eso es importante consultar con el especialista para determinar cual es el más adecuado. Los rellenos faciales más solicitados suelen ser en los labios, el mentón, los pómulos, la zona de las mejillas, o el área mandibular.

Ácido hialurónico

El ácido hialurónico se encuentra de forma natural en nuestro cuerpo, por eso es uno de los rellenos faciales más utilizados ya que el organismo no lo interpreta como algo extraño y reacciona bien ante él. Los efectos perduran entre uno o dos años, dependiendo de la persona, ya que se trata de una sustancia absorbible.
Se trata de un procedimiento sencillo, siempre que nos pongamos en manos de profesionales y especialistas. Se infiltra la sustancia en las arrugas y líneas de expresión que queramos tratar, y así se rellenan al momento. El contorno de ojos, alrededor de la boca y la zona nasogeniana son las áreas faciales que más se suelen tratar con ácido hialurónico.

Toxina botulínica

Hace años que el relleno con toxina botulínica se convirtió en el rey de las técnicas de rejuvenecimiento facial poco invasivas. Se trata de un procedimiento sencillo aunque es importante elegir bien al especialista que lo realiza; proporciona unos resultados visibles casi de forma inmediata. Las infiltraciones se realizan directamente sobre los músculos de la cara, provocando su relajación.

Los efectos de la toxina botulínica perdurarán entre cinco y seis meses, posteriormente tendría que realizarse sesiones de recordatorio. Normalmente se usan para tratar las arruguitas del contorno de ojos, frente y zona de alrededor de la boca.

Hilos tensores

Los hilos tensores son una de las opciones más extendidas cuando el objetivo es prevenir o eliminar la flacidez del rostro. Tienen la capacidad de recuperar el contorno facial y regenerar la piel; se introducen en el rostro creando una malla tensora. Suelen ser hilos reabsorbibles, biodegradables y biocompatibles, por lo que no requieren mantenimientos.
Los resultados de los hilos tensores duran aproximadamente unos doces meses, aunque como en la mayoría de estos tratamientos, dependerá de cada persona.

Benefíciate de los tratamientos de rejuvenecimiento facial en la Clínica de la Dra Meli

Debido a la variedad de tratamientos que ofrece el sector de la medicina estética contra el envejecimiento, será fundamental la mirada de un especialista para decidir qué tratamiento de rejuvenecimiento facial se adecua más a nuestras necesidades. Se tendrá que tener en cuenta las características de la persona, los problemas que quiere tratar y los resultados a los que se desea llegar.

¿Quieres saber más sobre tratamientos de rejuvenecimiento facial? No dudes en consultarnos, y la Dra Meli se encargará de estudiar tu caso y proporcionarte el mejor asesoramiento personalizado.