Son muchas las personas que sufren problemas disfuncionales o que no están contentos con el aspecto de su nariz, y deciden solucionar este conflicto con la cirugía. Según la SECPRE, la rinoplastia o cirugía de nariz está entre las intervenciones de cirugía plástica más realizadas en España.

¿En qué consiste la cirugía de nariz?

La rinoplastia o cirugía de nariz es la intervención quirúrgica que modifica la forma de la nariz, el aspecto y funcionalidad del apéndice nasal. La parte superior de la estructura de la nariz es hueso, mientras que la inferior es cartílago; con la rinoplastia se puede modificar tanto el hueso como el cartílago o la piel de la zona si fuera necesario.

Esta cirugía debe realizarse en quirófano y se utiliza anestesia general o local con sedación; la elección de la anestesia depende de cada paciente y los criterios del cirujano. La intervención suele durar entre una y dos horas y es necesario un corto ingreso hospitalario de una noche.

Consiste en realizar incisiones por debajo de la nariz y en ocasiones en la base de las alas nasales. Después, la piel de la nariz se separa de su soporte para finalmente esculpirla con la forma deseada. Tras la cirugía se coloca una escayola para ayudar a mantener la nueva forma de la nariz durante una semana. Casi siempre se suele colocar un taponamiento en las ventanas nasales durante 24-48 horas aproximadamente.

Rinoplastia estética o funcional

Los motivos por los que se suele realizar una cirugía de la nariz suelen ser dos: por estética o por problemas de funcionalidad.

  • Rinoplastia estética. Con esta intervención se quiere corregir los diferentes aspectos estéticos de la nariz. Una vez se haya identificado el defecto que se quiera modificar, será el cirujano, tras realizar las simulaciones pertinentes, el encargado de determinar la nueva forma de la nariz del paciente para conseguir la armonía proporcional con el resto del rostro.

 

  • Rinoplastia funcional. Suele tratarse de casos de septorrinoplastia o corrección del tabique nasal desviado, esta malformación puede tener causas congénitas o ser debido a traumatismos y puede ocasionar dificultades respiratorias, dolores de cabeza, trastornos de audición, sinusitis o faringitis. Con esta intervención se eliminan las partes óseas deformadas; aunque, a menudo esta cirugía se complementa con una rinoplastia estética si el paciente está descontento con el aspecto de su nariz.

Técnicas de cirugía de nariz

Principalmente existen dos técnicas para realizar una cirugía de la nariz: la rinoplastia abierta y la rinoplastia cerrada.

Rinoplastia cerrada

Se lleva a cabo a través de los orificios nasales de la nariz, siendo la vía para manipular los diferentes huesos y cartílagos de la nariz hasta conseguir el aspecto deseado. Es la técnica más demandada y realizada en la actualidad debido a los buenos resultados que ofrece sin necesidad de abrir la nariz, y garantizando que no haya cicatrices en el exterior.

Rinoplastia abierta

Con esta técnica se realiza una pequeña incisión en la zona entre la punta y la base de la nariz para separar de la estructuro ósea. Una vez realizada las modificaciones necesarias a nivel de hueso o cartílago se hace una pequeña sutura que apenas será perceptible.

Rinoplastia secundaria

También conocida como postraumática o de revisión, se trata de una intervención que se realiza por segunda vez o posterior vez. Consiste en arreglar e intentar naturalizar el resultado de una cirugía no exitosa, suelen ser un reto para el cirujano. En ellas, además de la estructura nasal, también hay que enfrentarse a la cicatrización e intervención previa.

¿A quién va dirigido?

La rinoplastia es una intervención recomendada para personas que presentan una disconformidad con el aspecto estético de su nariz o, en algunos casos, que sufra de problemas disfuncionales. El paciente, al igual que en cualquier intervención quirúrgica, debe estar físicamente sano y mentalmente estable, además de ser realista en cuanto a las expectativas de la cirugía. Se recomienda realizar estar intervención a partir de la adolescencia, es decir, con 16 años o más para que las estructuras nasales involucradas hayan completado su desarrollo; a partir de esta edad se considera que su desarrollo ha llegado a su fin y se encuentran emocional y socialmente preparados para la intervención.

¿Qué se puede corregir con la rinoplastia?

  • La nariz es demasiado grande para la cara
  • Existe una protuberancia o un hundimiento en el perfil de la nariz
  • La nariz vista de frente es ancha
  • La nariz vista de frente está torcida
  • La punta de la nariz es gruesa
  • La punta de la nariz está caída (conocido como nariz aguileña)
  • Los agujeros nasales están demasiado abiertos o cerrados
  • Eliminar la giba o caballete
  • Cambiar el ángulo entre la nariz y los labios
  • Algunos casos de dificultad para respirar correctamente

Cicatrices

Debemos partir de la idea de que todas las intervenciones quirúrgicas dejan cicatrices. En la rinoplastia también quedan cicatrices, aunque por su localización y diminuto tamaño son casi imperceptibles. En el caso de la rinoplastia cerrada, es una intervención que se realiza por dentro de la nariz, por lo que las cicatrices quedan en el interior. En la rinoplasria abierta la incisión se realiza en la base de la nariz, por lo que la marca pasa desapercibida.

Postoperatorio tras la cirugía de nariz

Una de las principales preocupaciones de las personas que se someten a una rinoplastia es el postoperatorio y la recuperación. Aunque se piensa lo contrario, el postoperatorio de esta cirugía es realmente llevadero y poco doloroso; bastará con analgésicos y antiflamatorios recetados por el especialista.

Es habitual que durante las primeras 24 horas, tras la cirugía, el paciente tenga sensación de inflamación en la cara y molestias sobre la nariz. En ocasiones, es normal, un ligero sangrado durante un par de días.. Podrá volver a su rutina habitual pasadas dos semanas aproximadamente, y también será esa la fecha en la que desaparezcan los hematomas y el hinchazón; aunque no es recomendable realizar actividades físicas como natación o salir a correr durante 3 meses, debe evitar golpes en la nariz y tomar el sol al menos 8 semanas.

Si necesitas más detalles de esta intervención, tienes dudas o estás pensando en realizarte una rinoplastia, ponte en contacto con nosotros y la Dra Meli te asesorará sobre este procedimiento.