Si alguien te cuenta que los implantes mamarios duran para toda la vida, que nunca hay que cambiar las prótesis de mama, y que después de la cirugía nunca más tendrás que preocuparte por ellos… no te está contando toda la verdad.
Las prótesis mamarias de última generación se integran de tal forma que casi parece que formasen parte de ti de forma totalmente natural. Y muchas mujeres tienden a olvidarse de su presencia. A muchas otras les da pereza, o incluso les provoca cierto miedo o preocupación, tener que plantearse chequeos y posibles sustituciones de las prótesis.
Pero del mismo modo que no debes olvidar revisar tus pechos como clave para la prevención del cáncer de mama, tampoco puedes desentenderte del chequeo de tus prótesis. Porque éstas, aunque puedan permanecer muchísimo tiempo sin generar problemas, no tienen una duración ilimitada.
Como ocurriría con cualquier otro elemento, ya solo el propio paso del tiempo les afecta.
Hoy vamos a hablar de un par de temas muy importantes, que no nos cansamos de recordaros a las pacientes de cirugía mamaria con prótesis: la importancia vital de la prevención y las posibles razones que pueden motivar un cambio de implantes mamarios.
Y antes de empezar, puedes estar tranquila. Miles de mujeres recambian sus prótesis en algún momento de su vida, por múltiples motivos, con excelentes resultados y sin grandes molestias en el postoperatorio.
¿Lista para enterarte de todo? ¡Comenzamos!
He oído que cada 10 años se deben cambiar los implantes mamarios
No es cierto que todas las prótesis mamarias deban cambiarse a los diez años de su colocación. De hecho, existen pacientes que llevan los mismos implantes, sin ningún problema, desde hace más de veinte años.
Los implantes mamarios no son eternos. ¡Pero tampoco tienen una fecha de caducidad concreta!
La idea de que las prótesis mamarias tienen que cambiarse cada 10 años no es un mito que surja de la nada. Hace muchos años, antes de la nueva generación de implantes ‘definitivos’ de gel cohesivo de silicona, se consideraba que esa era la fecha perfecta del recambio, para evitar roturas y otros problemas.
Como solemos decir muchas veces en este blog, cada paciente es única. De modo que la duración de los implantes dependerá del caso particular de cada mujer.
Ahora seguro que te estás preguntando: ¿y cuáles son los motivos más frecuentes para cambiar una prótesis mamaria? Te los explicamos a continuación.
Razones por las que se puede realizar un cambio de prótesis de mama
Hay diversas razones que llevan de nuevo a las pacientes a quirófano para cambiarse los implantes mamarios. Y lejos de lo que pudieras pensar a simple vista, no todas ellas están relacionadas con roturas, el proceso de envejecimiento u otros problemas relacionados.
Muchas mujeres, simplemente, han cambiado de gusto o parecer estético y desean cambiar el tamaño que se pusieron en su momento. Incluso encontramos numerosos casos de mujeres a partir de los 45 o 50 años que deciden quitarse las prótesis mamarias para siempre. ¡Y eso también es posible!
Aquí enumeramos algunas de las razones más habituales para cambiar los implantes.
Aumentar el tamaño del implante mamario
En efecto, es posible cambiar unas prótesis mamarias pequeñas por otras más grandes. No se trata de una cirugía complicada y no tiene asociados problemas de flacidez o de exceso de piel. Se practica una incisión en el surco submamario, se extrae la prótesis anterior y se coloca la nueva, para lograr la proyección deseada por la paciente.
Si este es tu caso, pero todavía no han pasado 6 meses desde tu primera intervención, te recomendamos que tengas paciencia y esperes un poco. Una vez que han pasado entre 6 meses y 1 año desde que te operaste, ya podrás hacerte una idea de realmente cuáles son tus resultados definitivos. Es mejor no precipitarse y comprobar cuál es el verdadero resultado final antes de tomar la decisión de modificar el tamaño.
Reducir el tamaño de la prótesis mamaria
Lo mismo ocurre con las mujeres que desean reducir el tamaño de una prótesis que consideran que es demasiado grande para sus gustos actuales. En tales casos, seguramente sea necesario asociar a la introducción de los nuevos implantes de menor tamaño una pequeña reducción mamaria si existe piel redundante y una mastopexia (elevación del pecho).
Esto último tiene todo el sentido del mundo: si has llevado unos implantes mamarios grandes, la piel de tus senos se habrá adaptado a ese tamaño. Para modificarlo, debemos reconstruir la forma de la mama para que quede perfecta.
La prótesis mamaria se ha roto
El índice de rotura de las prótesis mamarias es bajísimo, especialmente si nos encontramos en la primera década desde la intervención. Están sometidas a unas pruebas súper estrictas para su homologación.
No debes alarmarte ni preocuparte en exceso ante este problema. Las prótesis de calidad son tremendamente seguras. Solo para que te hagas una idea, la rotura no conlleva ningún peligro inminente que requiera que pases por quirófano con urgencia. Esto se debe a estar fabricadas con un gel cohesivo de silicona, que impide que la sustancia se propague por el cuerpo.
En caso de que se produzca una rotura o una fuga, la intervención es sencilla: las prótesis antiguas se retiran y se colocan las nuevas.
Contractura capsular
Como seguramente ya sabes (especialmente si portas implantes mamarios), existe algo llamado “cápsula periprotésica”, que no es más que una reacción natural del organismo ante la presencia de un cuerpo extraño.
Que se forme esta cápsula para cubrir las prótesis de mama es algo normal y necesario. Es un proceso de cicatrización.
El problema surge en determinadas pacientes cuyo organismo reacciona de una forma no deseable ante este proceso de encapsulamiento, por ejemplo por la acción de una bacteria o por un golpe en el postoperatorio.
La contractura capsular consiste en el endurecimiento y la contracción de dicha cápsula, ejerciendo presión sobre el implante, desplazándolo y deformando la mama.
Se detecta mediante exploración y puede solucionarse en quirófano antes de que conlleve mayores problemas y dolor en las pacientes.
Antigüedad de los implantes mamarios
Los implantes mamarios, como ocurre con nuestro propio organismo, envejece. Y esto puede implicar que se deterioren y presenten roturas, fugas u otros problemas por fatiga del material.
Para saber cuál es el estado actual de tus prótesis mamarias tienes que acudir a revisión. ¡Es muy importante!
¿Tengo que hacerme revisiones periódicas de mis implantes mamarios?
¡Sin duda! Es algo que repetimos en consulta sin cesar. Nunca debes olvidarte de realizar revisiones de las prótesis mamarias, con más razón si han pasado varios años desde que te operaste.
Lo deseable es que mantengas revisiones anuales con tu cirujano, y que te realices tanto mamografía como ecografía mamaria. Puesto que no todos los problemas se detectan simplemente con una exploración en consulta.
Y, por supuesto, este tipo de chequeos también son de vital importancia desde el punto de vista de control oncológico y salud de la mama.
¿Tienes más dudas sobre los implantes mamarios? ¿Crees que ha llegado el momento de cambiarlos? Contacta con la Dra. Meli y resuelve todas tus incógnitas. Cuida de tus prótesis de mama con la seguridad de estar en las mejores manos.
[…] La durabilidad es otro gran hándicap a superar en el caso de los implantes de mama, pues aunque son cada día más resistentes, lo cierto es que no son eternos y cuando son colocados en mujeres jóvenes es habitual que tengan que ser sustituidos, al menos una vez, por desgaste o deterioro. […]
[…] ¿Duran las prótesis mamarias para siempre? […]