Cada vez más pacientes vienen a consulta preguntándonos si podemos cerrar las dilataciones de sus orejas. Una moda que durante un tiempo les encantó, ahora les genera rechazo, y quieren recuperar la forma original de sus lóbulos.
Las dilataciones pueden cerrarse, pero es un proceso más complejo de lo que a priori podríamos imaginar. De hecho, existe la creencia totalmente errónea de que hay remedios caseros o trucos que consiguen devolverle al lóbulo un tamaño normal.
Estos métodos, que básicamente implican dejar que el paso del tiempo haga su trabajo, puede que ayuden un poco en dilataciones muy pequeñas (de 6mm por ejemplo). Pero en el caso de dilataciones de mayor diámetro, no son en absoluto efectivos.
Si este es tu caso, no te preocupes. A continuación te explicamos qué tipo de intervención necesitas para volver a tener unos lóbulos de tamaño normal, sin dilataciones.
El problema de las dilataciones en las orejas
Cada vez vemos más este caso en consulta: una persona que hace tiempo se puso dilataciones en la oreja y que ahora, por motivos laborales, necesita quitárselas y recuperar la forma normal de su lóbulo.
Hay casos muy llamativos y de gran complejidad. Puesto que con el paso del tiempo, y como su propio nombre indica, estos expansores (especialmente si son de gran tamaño), van dilatando el lóbulo de la oreja, dada la elasticidad de éste.
Eso provoca que exista un enorme agujero, y que esa parte de la oreja esté completamente dada de sí. Muchas veces, apenas encontramos espacio en el lóbulo para poder trabajar en el proceso de reconstrucción.
Por lo tanto, no hablamos de una intervención sencilla y rápida como en el caso de un lóbulo rasgado. Cuando nos enfrentamos al cierre de las dilataciones de las orejas, especialmente cuando éstas no son precisamente pequeñas de diámetro, tenemos que recurrir a una intervención de cirugía reconstructiva.
No te preocupes, porque lo que implica esta intervención para ti no son ni graves molestias ni una recuperación postoperatoria que se te pueda hacer muy cuesta arriba. Lo que sí requiere es de manos muy especializadas en cirugía reparadora que sepan enfrentarse a una reconstrucción del lóbulo.
¿Cómo solucionar para siempre las dilataciones de las orejas?
Como comentábamos, el lóbulo de la oreja que ha pasado por unas dilataciones implica deformidades y pérdida de elasticidad en los tejidos. Y la única forma de cerrar para siempre esas dilataciones, por lo tanto, es recurrir a la cirugía reconstructiva.
Esta cirugía para cerrar las dilataciones puede realizarse mediante anestesia local y su duración estará determinada por la gravedad de cada caso. Y consiste tanto en la extirpación del tejido sobrante como en el aprovechamiento de una parte del tejido recuperable. Con ese fragmento lo que se realiza es, ni más ni menos, que la reconstrucción del lóbulo para que recupere una forma equilibrada y lo más parecida posible a su tamaño original. En ocasiones podemos añadir un pequeño relleno con grasa del propio paciente para que mejore la calidad de la piel y el lóbulo recupere una parte de la atrofia provocada por la dilatación.
Si esta intervención se lleva a cabo por profesionales de gran experiencia en este ámbito, y si la capacidad de recuperación de la piel del paciente es buena (si además no fuma y sigue a pies juntillas los cuidados postoperatorios mucho mejor), la cicatriz puede llegar a ser prácticamente inapreciable.
El paciente, una vez recuperado por completo y cuando su cirujano se lo indique, podrá volver a abrirse agujeros en las orejas para ponerse pendientes si así lo desea. El hecho de haberse operado para cerrar las dilataciones previamente no debería suponer ningún problema para lucir los pendientes que desee en el futuro.
¿Quieres volver a lucir unos lóbulos bonitos y de un tamaño normal? ¡No esperes más! Pide ya tu cita previa con la Dra. Meli.
Deja un Comentario